¿qué es un piercing bucal?
Un piercing bucal es una perforación que se realiza en alguna parte de la cavidad oral, como la lengua, los labios, las mejillas o el frenillo (el tejido que conecta la lengua o los labios con las encías), con el fin de insertar una joya con fines estéticos o de autoexpresión.
tipos de piercing bucal según su ubicación:
piercing en la lengua
Central
Es la perforación más común, ubicada verticalmente en el centro de la lengua
Horizontal
Atraviesa la lengua de lado a lado.
Vertical
La joya entra por la parte superior y sale por la inferior de la lengua
Venom / Viper
Dos perforaciones paralelas en la parte media de la lengua
Punta de la lengua
Se coloca en el extremo de la lengua.
Frenillo lingual (Web / Marley)
Se realiza en el tejido que une la parte inferior de la lengua con el suelo de la boca.
Piercing en los labios
Labret
Perforación debajo del labio inferior, centrada.
Labret lateral
Ubicado a un lado del labio inferior.
Monroe
En la parte superior del labio, a un lado
Madonna
Similar al Monroe, pero en el lado opuesto
Medusa / Philtrum
Centrado en la hendidura entre la nariz y el labio superior
Vertical Labret
Atraviesa verticalmente el labio inferior.
Snake Bites
Dos Labrets laterales, uno a cada lado del labio inferior
Angel Bites
Combinación de Monroe y Madonna.
Dolphin Bites
Dos perforaciones centradas debajo del labio inferior, juntas.
Spider Bites
Dos Labrets laterales juntos en un lado del labio inferior.
Piercing en las mejillas
- Generalmente se realizan de forma simétrica.
los piercings y su relación con la salud bucal
Los piercings bucales pueden tener implicaciones significativas para la salud bucal. Es crucial ser consciente de los riesgos antes de decidir realizarse uno y seguir cuidados adecuados si ya se tiene.
riesgos para la salud bucal
Infecciones
La boca alberga muchas bacterias, lo que aumenta el riesgo de infecciones en el sitio de la perforación. Manipular el piercing con las manos sucias también puede introducir bacterias.
Hemorragia prolongada
La perforación puede dañar vasos sanguíneos, causando sangrado difícil de detener.
Dolor e inflamación
Son comunes después de la perforación. En casos graves, la inflamación de la lengua puede obstruir las vías respiratorias.
Daño a los dientes
El contacto constante con la joya puede astillar o fracturar los dientes. También puede dañar restauraciones dentales como coronas.
Recesión de las encías
El roce del piercing puede hacer que las encías se retraigan, exponiendo la raíz del diente y aumentando el riesgo de caries y enfermedad periodontal.
Interferencia con funciones bucales
Los piercings en la lengua puede llegar a dificultar el habla y masticar alimentos
Mal aliento
La joya puede acumular bacterias y restos de comida, contribuyendo al mal aliento.
Reacciones alérgicas
Algunas personas pueden ser alérgicas a los metales utilizados en las joyas, como el níquel.
Enfermedades transmitidas por la sangre
Si la perforación no se realiza con instrumentos esterilizados, existe riesgo de transmisión de enfermedades como la hepatitis B o C.
cuidados para minimizar los riesgos
Elegir un profesional
Asegurarse de que la perforación se realice en un lugar limpio y con equipos esterilizados por un profesional con experiencia.
Una higiene rigurosa
Limpiar el piercing y la boca cuidadosamente según las instrucciones del profesional. Esto incluye enjuagues bucales antisépticos (sin alcohol) después de las comidas y antes de dormir, y cepillar suavemente alrededor de la joya.
Evitar tocar el piercing innecesariamente
Manipular el piercing con las manos sucias aumenta el riesgo de infección.
Una dieta blanda
Durante la cicatrización, consumir alimentos blandos y evitar alimentos picantes, ácidos o muy calientes que puedan irritar la zona.
Evitar el alcohol y el tabaco
Estas sustancias pueden interferir con la cicatrización
Realizar revisiones dentales regulares a tu dentista de confianza
Informar al dentista sobre el piercing para que pueda controlar cualquier posible problema.